lunes, 25 de febrero de 2008

Nueva Ley de Carrera Pública Magisterial: Avance o Retroceso?

Frente a los acontecimientos y protestas que han ocurrido en el país frente a la recientemente promulgada Ley de la carrera magisterial me parece pertinente un análisis de ésta para definir cuales son los beneficios de dicha norma y de qué manera se está favoreciendo al tan olvidado sector Educación.


Para comenzar debemos señalar que la situación del magisterio en nuestro país es una de las más deplorables en nuestra región. Por un lado tenemos un país donde los profesores tienen sueldos muy bajos, los cuales no son suficientes para cubrir la canasta alimenticia de sus hogares, ni sus necesidades básicas.


Además los profesores no cuentan con la capacitación suficiente, ni con los incentivos necesarios para mejorar su nivel profesional. Del otro lado, tenemos un sindicato de profesores politizado, que no representa el sentir de la mayoría de los profesores debido a que la cúpula del SUTEP no es elegida democráticamente entre todos los agremiados y los actuales dirigentes se mantienen en sus puestos hace años.


Ante esta situación tanto el Congreso como el Gobierno presentaron la Ley de la Carrera Pública Magisterial (ley 29062). Como la misma ley lo define el alcance que tiene es para todos los maestros del nivel de la educación básica, es decir, para aquellos que enseñan en inicial, primaria y secundaria. La nueva ley presenta diversos avances referentes a diversos aspectos de la carrera magisterial.


Primero, la ley rescata el mérito de los docentes y lo convierte en elemento esencial para ascender en la carrera magisterial, al establecer un sistema de niveles (del 1 al 5). Personalmente, creo que este es el mayor logro de la ley, debido a que una de las mayores trabas al desarrollo del país y en el que se basa mucha de las desigualdades existentes es la falta de un sistema meritocrático que premie el esfuerzo y el trabajo. Uno de los sectores más relegados es el magisterio y por eso esta me parece una alternativa plausible que va a fomentar la sana competencia y el desarrollo de las capacidades del maestro.


Segundo, otra novedad que trae esta ley es el establecimiento de un sistema de evaluación que permitirá medir los avances del profesor y le permitirá ascender en los niveles antes mencionados. Este es uno de los puntos más polémicos ya que la ley dice que los profesores que no pasen tres evaluaciones serán separados de sus puestos. Con respecto a esto considero que es una medida pertinente la que ha tomado el Congreso debido a que hay muchos otros profesores sin trabajo que pugnan por un puesto en el magisterio público y además si pretendemos mejorar nuestra educación, debemos tener a los mejores profesionales para educar a los niños y adolescentes de nuestro país.Por otro lado, debemos considerar que en cualquier organización que pretenda ser eficiente, el recurso humano es imprescindible y debe estar en constante capacitación (el cual es otro punto loable de esta ley, ya que se establecen capacitaciones gratuitas para todos los profesores).


Tercero, la ley 29062 permite por primera vez que los padres de familia participen en la evaluación de los profesores. Esto es trascendental en una educación que busque formar personas preparadas, ya que el proceso de educación no es un proceso que solo abarca la escuela, sino también el hogar, que es el lugar donde se aprenden las primeras lecciones y los valores y principios que guiarán la vida del alumno.


Cuarto, la ley establece asignaciones y bonificaciones excepcionales tomando como referencia la remuneración íntegra que reciben los maestros, y no una fracción. Es evidente que si pretendemos tener un sistema meritocrático se deben de establecer diversas remuneraciones e incentivos para que el maestro vea que su esfuerzo si sirve y es reconocido por su empleador, el Estado.


Estos, son los principales beneficios que presenta la ley examinada. Debemos recalcar que puede haber algunos puntos en contra (que no han sido analizados debido a la extensión del ensayo) pero creemos que estos se ven opacados por los grandes avances que se han conseguido. La educación es la base del desarrollo de un país y los profesores son un elemento fundamental en este sector. Creo que esta ley no es la solución a los problemas del magisterio, pero es un gran avance que contribuirá al desarrollo de los profesores y por ende para al desarrollo de la educación y del país.


Andres Dulanto Tello
Secretario de Economía de UNES